Nueve meses con Windows 10
Instalé Windows 10 el primer día que la Technica Preview estuvo disponible. Tenía unas ganas locas de probar lo que ofrecía el nuevo sistema operativo de Microsoft, y de hecho ni siquiera tiré de máquina virtual. Creé una partición en mi unidad SSD y comencé a utilizarlo a diario. Windows 8.1 pronto se convirtió en el suplente en mi PC de sobremesa, porque Win10 me convenció desde el principio.
Tras todos estos meses debo decir que estamos ante el que probablemente será el mejor sistema operativo en la historia de Microsoft. Y digo que "será", en futuro, porque aún queda por saber cómo transformará la experiencia en tablets, smartphones, consolas o lo que tenga que venir. Yo tengo especiales ganas de saber cómo son esos smartphones de gama alta que nos preparan en Redmond, pero si cumplen con lo que espero mi OnePlus One podría ser pronto candidato a salir Wallapop. Así de convencido estoy.
He instalado Windows 10 en mi PC de sobremesa, en el Dell XPS 13 que probé antes de comprarme el mío y en un Surface 3 que tuve también en pruebas -y que no se recuperó del susto, no había drivers para este equipo en W10, porras-. No lo he instalado aún en mi Dell XPS 13 por la sencilla razón de que ahí quiero hacer las cosas en plan usuario final formalito, sin pecar de cagaprisas y esperando a que la opción de actualización gratuita -ya he reservado- aparezca en el escritorio. Resulta extraño convivir con Windows 8.1 cuando uno ya ha visto lo que ofrece Windows 10. Extraño y difícil, porque la verdad es que hay mucho de Windows 10 que mola.
He dado mis primeras impresiones hoy en Xataka desde una perspectiva más de experiencia que de características puras. Habrá análisis de la versión final, claro, pero hoy la idea era contar cómo habían ido esos meses. Os escribo desde Windows 10 Build 10240 -la que dicen es la RTM, aunque en Redmond no lo han confirmado-, y el sistema va fino fino. Cierto que algunas decisiones de diseño no me convencen, cierto que Microsoft Edge aún va detrás en casi todo, y cierto que Cortana es más una promesa que una realidad, pero con todo y con eso, Windows 10 promete un montón. Ya cumple -con algún que otro fallito- en su estado actual en PCs y portátiles, así que habrá que ver lo que nos prepara Microsoft en los próximos meses, cuando el ecosistema Windows 10 esté mucho más consolidado.
Si no lo habéis instalado aún, supongo que podéis esperar un poco más, ya no tiene mucho sentido instalar esta edición preliminar a dos semanas del lanzamiento definitivo. Si lo habéis hecho, ¿qué os parece?