¿Tú también quieres montarte un PC con un AMD Ryzen?

No lo necesito. De verdad. No necesito un nuevo PC. Me quedó bastante claro tras las pruebas con el HP Omen X, un equipo que me dejó claro que soy básicamente igual de
buenomalo al 'Battlefield 1' tanto si juego con mi Radeon R9 280 como si lo hago con una GTX 1080.
Y sin embargo, no paro de pensar en ello. Hace unos días estuve a punto de gastarme los dineritos tras ver cómo se comportaba un procesador aparentemente ridículo, el Pentium G4560 que por 59 euros barre del mapa en rendimiento a mi viejo, ruidoso y glotón Intel Core i7-920. Eso me obligaría a actualizar otros componentes, pero es que estoy también bastante harto de mi torre CM Stacker y de una equipo que consume mucho y hace mucho ruido para el rendimiento que me da.
Podría aguantar perfectamente con esta vieja configuración: me da para trabajar sin problemas cuando necesito un plus de potencia y sobre todo cuando quiero probar algún nuevo juego potente —como el citado 'Battlefield 1'—, y eso de tener un equipo de sobremesa decente con mi Windows 10 en modo Windows Insider (lo tengo a la última) también tiene su aquel.


Pero qué queréis que os diga. Me vuelve a apetecer actualizarlo. Es un caprichito, pero es que la cosa se está poniendo de lo más interesante este año. Los AMD Ryzen están a la vuelta de la esquina, y también lo están las gráficas de AMD con arquitectura Vega. Esas dos jugadas aparentemente maestras de esta firma podrían poner en serios aprietos a Intel y a NVIDIA, y a mí me dan la excusa perfecta para actualizar el PC o, más bien, a montarme uno nuevo.
De hecho últimamente estoy en modo PCMasterRace. De cuando en cuando me paso por la maravillosa PCPartPicker para ver los montajes de la gente, que se monta unos PCs por presupuestos de risa —este con el citado Pentium y una RX 480 es un buen ejemplo— y que cumplen con todo lo que necesito y más. No tengo presupuesto definido, pero no querría pasar de los 700-800 euros, y salvo los SSD (y quizás la fuente), creo que cambiaría todo lo demás.
El problema, claro, es que los lanzamientos iniciales de los AMD Ryzen y Vega se salen de presupuesto: están orientados a gente con más exigencia, y no es mi caso. Quizás un Ryzen 5 1500 (65 W TDP, 6 núcleos, 229 dólares) sea la opción, pero incluso ese modelo podría ser demasiado para mí. Da igual porque no tengo (excesiva) prisa. Me parece a mí que el próximo Black Friday voy a romper la hucha.
¿No os está pasando lo mismo un poco a vosotros?