El patrón que llegó tras la tormenta

Ayer fue un día duro por diversos motivos, pero entre ellos estuvo la avalancha de comentarios que recibió -como esperaba- el artículo sobre el cambio en el feed RSS de Incognitosis. No publiqué nada en el blog precisamente porque no tenía fuerzas: contestaros a todos -y hacerlo como debía, pausadamente y con algo más de cabeza que la que demostré en el post- me llevó mucho tiempo, y aprendí unas cuantas lecciones.

La más importante, que el tono no fue el adecuado. Hubo muchos que lo indicásteis, pero creo que el que más claro lo dejó fue Jose, que en uno de los últimos comentarios lo explicaba muy bien:

Creo que el tono de frustración tampoco ha ayudado a motivar las suscripciones, tal como ha indicado alguien en los comentarios, ha hecho que los que no contribuían se sintieran como “leechers”, y creo que ha conseguido el efecto contrario al perseguido, al menos en mi caso.

Puede que mi post fuera precisamente contra ese grupo de usuarios -tengo la esperanza de que sean los menos- que efectivamente uno podría considerar como ‘leechers‘, rollo chupópteros digitales. Los que lo quieren todo gratis, no participan de ningún modo (no me refiero solo a económicamente) y encima suelen ser fuente de comentarios poco constructivos, con críticas no argumentadas o quejas por la extensión o posición que he tomado en el artículo.

Me dejé llevar por un poco por el calentón de lidiar con eso todos los días aquí y en Xataka, y la pagué con todos. Desde aquí, mis disculpas. Respeto a todos los que habéis comentado y sobre todo agradezco el tono, ese que siempre ha sido uno de los valores que más orgullo me ha dado en Incognitosis: que la conversación (casi) siempre es agradable, argumentada, coherente y hasta amistosa. Sin caer en simplicidades: hasta cuando estáis de acuerdo con otro lector (o conmigo) lo argumentáis. Y el post de ayer lo demuestra: no hubo ni un comentario –ni uno– que no estuviese apoyado por razonamientos.

Gracias por eso.

Esto no significa que vaya a cambiar de opinión con respecto al feed RSS (lo siento), pero sí que retomo el blog un día después con otro talante, que espero que sea mucho más positivo.

A ello me han ayudado tres cosas: los citados comentarios al post de ayer, ese comentario en particular de Jose y algo igual de sorprendente: que me ha llegado un nuevo patrón hoy. Fernando Benito, que comenta aquí desde hace tiempo, se ha apuntado con una aportación de 1 dólar al mes. La cantidad, le decía yo después, daba igual: el gesto era brutal tras la tormenta. Pero la cosa iba a más en su respuesta posterior que cito (me ha dado su permiso):

creo que esperabas demasiado

Entiendo que esperaras algo más de 90 euros al mes, pero tampoco mucho más. Por la lista de objetivos de la campaña, lo que veo es que esperas a recibir mucho para ir poniendo más carne en el asador; las cosas no suelen funcionar así, si quieres que esto funcione a tope, tienes que poner toda la carne en el asador, con los riesgos que conlleva. Entiendo que no quieras arriesgarte y prefieras seguir llevando Incognitosis como hasta ahora, pero entonces hay que entender que los beneficios van a ser los de un hobby con el que por suerte te puedes llevar un extra al mes, no los de un trabajo, aunque sea uno mal pagado

Las dos frases que recalco en negrita seguro que son compartidas por muchos más de vosotros. En ninguna de ellas tengo demasiado con lo que contraatacar: son verdades como puños. Es verdad que en nuestro país (y yo diría que en todo el mundo hispano) hay diferencias claras con los países de habla inglesa en ese apartado: parece que sea mucho más factible concebir allí este tipo de proyectos en los que uno valora y paga por lo que consume. No sé por qué es. Igual todo empezó con las dobles pletinas en los 80 (“grábame estos juegos para el C64” -> y aún así yo compraba un porrón) las unidades CD-RW en los 90, de DVD-RW (y +RW) un poco más adelante, y luego la explosión de Internet, Napster, Emule y el compartir es vivir. Pero eso mismo lo vivieron en otros países y el impacto final en esa forma de pensar es distinto, como digo. No tengo ni idea, quizás sea un tema cultural.

En el segundo, poner toda la carne en el asador como le decía a Fernando es complicado por la cantidad de tiempo de la que dispongo. Si algún día me despiden de Xataka (que todo puede pasar) obviamente podría plantearme esto de forma distinta, pero hoy por hoy es cierto que básicamente es eso, un hobby. Algo que me encanta hacer. Y que algunos aporten me parece asombroso, aunque sí que es verdad que en algunos tramos de la campaña no ver movimiento me decepcione porque creo que estoy poniendo toda la carne que ahora mismo puedo poner en el asador.

Así que no hay mucho más que decir salvo que me disculpo por el calentón y el tono desafortunado. Quiero dejar ya un poco este tema aparcado y centrarme en escribir de lo de siempre. Haré actualizaciones mensuales de cómo va la campaña, meteré algún banner y algún PayPal.Me de cuando en cuando, pero sin ser tan palizas, que como decía Remoquete parezco una ONG o la Wikipedia. Otro de los que me han abierto los ojos, ole.

Gracias a todos. A los que me leéis sin más, a los que comentásteis ayer con ese buen tono, a Jose, a mis patrones, a los que han aportado vía PayPal.Me en alguna ocasión, y cómo no, a Fernando Benito.

A ese patrón que llegó después de la tormenta. Con un par.