Patreon sigue vivo (y yo también)

Ya no os doy la tabarra con Patreon. Lo hice durante un tiempo, sobre todo porque quería impulsar un proyecto con el que me planteaba a mí mismo una pregunta bastante utópica. ¿Y si pudiera ganarme la vida con Incognitosis? La campaña de Incognitosis en Patreon empezó con el décimo aniversario de Incognitosis, el 15 de mayo de 2015.

Lo de iniciar campaña en Patreon era la forma ideal de comprobarlo. La idea era que gente que me llevara leyendo mucho tiempo apreciase el esfuerzo y se animase a colaborar y aportar económicamente con algo de dinero. La cosa se animó al principio, y llegué a tener más de 40 patrones y casi 100 dólares mensuales de ingresos.

Luego vinieron los problemas. En diciembre de 2017 los creadores de Patreon trataron de cambiar el modelo de ingresos haciendo básicamente que los patrones de un sitio web (los que colaboráis) tuvieseis que pagar más para que a nosotros nos llegase lo mismo que antes. Las comisiones eran mucho peores con ese movimiento, lo que hizo que yo mismo plantease alternativas con Liberapay, que cobra menos comisión y plantea un curioso modelo anónimo. Varios de los que hasta entonces habían estado aportando dejaron de hacerlo para nunca volver, y otros fueron contribuyendo con la segunda opción, Liberapay (el iconito amarillo de la cabecera) o con pagos ocasionales vía PayPal.Me que aún siguen llegando de cuando en cuando.

Pero aquel tropiezo de Patreon, que acabó dando marcha atrás, fue también tropezón para esos ingresos mensuales, que se han quedado en unos 30 dólares mensuales a los que contribuyen 16 gloriosos patrones a los que les debo las gracias por tanto tiempo colaborando con mis esfuerzos.

No lo digo mucho, pero ahí están Pol, Carlos, Francisco Javier, Sergio, Jesús, José María, Miguel, Javier, Jorge, Ángel, Javier A., Javier, Francisco, Raúl, Andreu y Raúl desde hace un montón de tiempo. Algunos desde el principio de los tiempos, otros desde hace menos. Todos grandes. Precisamente el post lo ha inspirado Francisco Javier, que se suscribió ayer y se ha convertido en nuevo mecenas de Incognitosis.

De cuando en cuando me digo a mí mismo que debería relanzar Patreon con más ventajas. Quizás con posts exclusivos para patrones -no era la idea inicial, pero ahora sí la barajo-, quizás con podcasts si llego por ejemplo a 300 o 400 dólares al mes, no sé, algo así. Que me compense a mí y que os compense a vosotros. Y luego me doy cuenta de cómo va el mundo y lo que nos espera con el estrés de las suscripciones -a este paso os vais a tener que suscribir a un montón de sitios web de texto que disfrutábais gratis, como ha ocurrido ya con los Netflix, Spotify y similares- y dejo de pensar en ello.

Pero claro, el pensamiento está ahí. Igual debería liarme la manta a la cabeza, dejarlo todo y ponerme a escribir solo para Incognitosis. ¿Conseguiría con eso suficiente para vivir? No lo sé, y no sé si quiero comprobarlo porque sinceramente, mis experimentos no me dan buenas vibraciones en este sentido.

De momento lo que sé es que cuatro años y medio después de iniciar la campaña de Patreon sigo igual de orgulloso de este humilde blog, que me escribir temas de todo tipo. Desde análisis de lámparas o historias de Harry y Sally a esas reflexiones sobre tecnología y móviles que me permiten dar rienda suelta a mis filias y fobias  (de estas hay muchas) friquis. Y luego están las otras historias, esas más personales que tanto gustan aunque me cueste más compartir. Estoy particularmente orgulloso de entradas como 'Perspectivas' y 'Lucía a los 9' o 'Ajedrez y palillos', y puede que me anime con más cosas como estas en el futuro, aunque ese ámbito más personal querría ponerlo un poco a prueba en una novela algún día.

No sé si lo haré, pero lo que sí tengo claro es que Incognitosis tiene cuerda para rato. Y aunque no os dé mucho la tabarra por aquí (en cierta forma os la doy con los Incognichollos, que se han convertido en una alternativa más para sacarme de menos pobre) que sepáis que si queréis siempre podéis apuntaros y convertiros en suscriptores, patrones, mecenas, o amigos de Incognitosis, como queraís llamarlo. Tenéis Patreon, tenéis LiberaPay y tenéis PayPal.Me.

Gracias a todos. Especialmente, claro, a los que habéis aportado, a los que aún lo hacéis y a los que lo haréis tras leer este post tras daros cuenta de la oportunidad sin parangón que os presento ;)