Las dos Mozillas
Me da mucha pena lo que está pasando en Mozilla. La empresa era nuestra particular Numancia tecnológica. Uno de los pocos reductos de los estándares web abiertos y la defensa del usuario está viéndose amenazada por lo de siempre: el maldito parné.
Leía ayer este artículo en el que un chaval llamado Cal Paterson publicaba un dato llamativo y sorprendente: la cuota de mercado de Firefox no ha parado de bajar en los últimos años, pero curiosamente lo que cobran sus directivos no ha parado de subir.


La CEO de Mozilla, Mitchell Baker, cobró 2,4 millones de dólares en 2018, una absoluta burrada de por sí y una cantidad de dinero absolutamente vergonzosa si tenemos en cuenta que la empresa despidió a 250 personas recientemente porque tenía problemas de caja. Como siempre, los que acaban pagando son los curritos.
Como bien apuntaba Paterson, la cosa no acaba ahí. La ética de Mozilla es discutible, porque sacan pecho al hablar de cómo protegen la privacidad del usuario pero ponen como buscador por defecto el de Google. Eso, claro, permite que la empresa logre contar con unos ingresos garantizados importantes: 450 millones de dólares al año, dicen por ahí, y aunque no esconden esa realidad, lo cierto es que tampoco lo dicen muy alto porque siguen intentando presumir de que como indica su sitio web oficial (haced hover en la pestaña al abrir su sitio web), quieren una "internet por la gente, no para el lucro". Y sin embargo, atentos a la tabla de Wikipedia:

A mí, la verdad, todo esto me apesta. Escribí un artículo en Xataka sobre los despidos y el peligro de una "web by Google" hace poco —vamos camino a ello—, y Mozilla, que era la única que paraba un poco los pies a la empresa de Mountain View, se tambalea. No ya por la menguante cuota de su navegador Firefox, sino por una gestión que desperdicia recursos en proyectos curiosos pero no rentables y no los dedica a cosas que deberían ser el núcleo de sus esfuerzos.

El resumen de Frank Hecker al que hacía referencia en el post de Xataka era estupendo para entender cómo funciona Mozilla. Todos nos imaginamos que Mozilla es una compañía llena de friquis maravillosos, pero la realidad es que hay dos Mozillas distintas a nivel organizativo, atentos:
- Mozilla Foundation:
- ONG creada en 2003.
- 80 personas en plantilla (2018).
- Objetivo: desarrollo del código de Firefox.
- Presupuesto: 27 millones de dólares.
- Clientes: los usuarios.
- Mozilla Corporation:
- Empresa con ánimo de lucro.
- Plantilla de 1.000 empleados (2018, ahora menos).
- Objetivo: productos y servicios 'experimentales'.
- Presupuesto: 440 millones de dólares.
- Clientes: empresas como Google.
Hay que reconocer que dentro de la corporación se intentaron sacar adelante proyectos simpáticos como Send (un WeTransfer bastante majo), ninguno ha logrado cuajar. Send ha sido cerrado hace poco, pero hay otros muchoso en el candelero cuyo futuro es incierto. Por ejemplo el de la VPN de Mozilla —que al parecer es Mullvad VPN pero con la pegatina de ellos— y del que dicen que no es tampoco la pera limonera.
El gestor de contraseñas, su servicio Firefox Relay para generar y destruir direcciones de email o proyectos como Pocket, que costaron 25 millones de dólares y no sé si dan ingresos, no parecen aciertos de una empresa que es valiente pero errática.
Y luego está Firefox OS, por ejemplo, era una ideaza que generó mucho optimismo —y en mi caso, muchos posts— pero cuya ejecución era bastante pobre. Pronto se quedó en agua de borrajas, como pude comprobar personalmente, aunque eso sí, sirvió para que algún que otro vendemotos nos vendiera precisamente eso, la moto de que iba a revolucionarlo todo.
Hasta Firefox (no menciono al casi olvidado Thunderbird, pobre) está en una fase rara. Yo hace años que lo utilizo casi por despecho a Chrome —que me parece un navegador estupendísimo y también estupendamente peligroso para mi privacidad—, y también lo uso en Android, pero la última versión me ha hecho repensarme si no volver al redil. De momento resisto, pero lo cierto es que a estas alturas no descarto ya nada. Tengo las fidelidades un poco temblando con tanta tontería, qué queréis que os diga.
No sé. Me da la sensación de que hay dos Mozillas. Una muy fiel a la 'internet para la gente'. Valiente, un poco loca y genial, dispuesta a probar cosas que ayuden a hacer del mundo un lugar un poquito mejor, más privado y seguro para los usuarios. La otra es la de la 'internet para el lucro', y el problema es esta última es la que está ganando la batalla. No solo eso: está contaminando todo lo que hace la primera, que diría que solo necesita un gestor que sepa centrarse y buscar otras formas de sobrevivir que no sean alquilarse a Google.
Esto no pinta bien para ninguna de las dos Mozillas, pero es que las necesitamos porque no nos quedan muchas más Numancias para resistir.
Mal rollito.