Hablemos de series

Hablemos de series
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Quede claro que no veo más series de las que veía antes, pero está claro que mucha gente sí y este está siendo un momento álgido para las plataformas de streaming de contenidos. Hace mucho que no hablo de las series que veo, así que un repaso rápido a mi actividad de visionado en Netflix desde principios de 2019 me permite repasar al menos ese recorrido:

  • The Blacklist: larga
  • You (temporadas 1 y 2): inquietante y fantástica
  • The Crown (temporada 3): exquisita
  • El método Kominsky (temporadas 1 y 2): simpática, divertida, estupenda
  • The Sinner: meh, pero con Bill Pullman era de esperar
  • Creedme: curiosilla, no está mal
  • Seven Seconds: corté en el segundo episodio
  • Mindhunter (temporada 2): fantástica, tanto o más que la primera
  • Dilema (temporada 1): Meh.
  • La ciudad secreta (temporada 1): curiosa
  • After life: espectacular. Sencillamente espectacular.
  • The Umbrella Academy: (temporada 1): llamativa, desde luego

A esa lista hay que añadir series de otras plataformas que he visto también en los últimos meses. Aquí no tengo un registro claro, pero:

  • The Boys: absolutamente espectacular
  • The Morning Show: chulísima
  • Big Little Lies (temporada 2): Meryl Streep inmesa, pero la primera temporada es mejor.
  • Fleabag: lo intenté 10 minutos. Creo que no es para mí.
  • Jack Ryan: resulta que Krasinski es creíble en su personaje. Entretenida, pero no espectacular.
  • Homecoming: algo pesada
  • Chernobyl: Dios mío, se me olvidaba. De lo mejor del año, sin ninguna duda. Absolutamente increíble.

Seguro que hay más, pero la verdad, no me acuerdo y no llevo tampoco un registro exhaustivo. De todo lo que he visto en estos meses debo destacar en primer lugar una serie que he tardado casi tres meses en consumir. Se trata de The Blacklist, que con sus seis temporadas y 22-23 episodios de 50 minutos por temporada se convertía en un reto.

La serie es, la verdad, un poco pesada. Entretenida a ratos, algo predecible,  y que tiene luces y sombras. O más bien, una luz y una sombra. James Spader como Raymond Reddington es la luz, Megan Boone, aka cara-de-pan-gallego-Keen, es la sombra. El reparto está (nunca mejor dicho) repartido y me quedo con el personaje de Aram y con los peculiares socios de Reddinton (Mr. Kaplan, el torturador y el bajito, no recuerdo sus nombres), pero la historia acaba cansando un poco, sobre todo por la pesada de Keen que es una petarda. Creo que no la recomendaría a no ser que queráis algo simplón.

La otra serie que quería destacar especialmente es 'The Boys' —el tráiler mola bastante, pero la serie es mucho mejor—, que me recomendó un amigo y que me parece absolutamente espectacular. No tenía ni idea de qué iba ni de cómo estaba basada en un cómic por lo visto bastante conocido. Lo que sé es que me parece una historia de superhéroes original, divertida y gamberra a más no poder, con un rollo Deadpool que le da un toque súper entretenido y simpático aun siendo un poco gore a ratos.

Seguro que tenéis sugerencias por ahí, pero para mí 'The Boys' está claro que es la gran sorpresa de los últimos tiempos. Comparable a esa sorpresa es 'After life', que es espectacular aun siendo algo deprimente, y quizás recomendaría 'The morning show', 'You' —se les va un poco la pinza al final, va de más a menos— y 'Mindhunter', cuya segunda temporada es tan estupenda como la primera. (Actualización: añado a esa lista de imprescindibles la miniserie de 'Chernobyl', que no había incluido en la versión original del post. Es, como digo en la lista, IMPRESCINDIBLE).

Ahora como siempre, os toca a vosotros. Con la lista y esas opiniones, espero que me sirváis de motor de recomendaciones personalizadas :) ¿Qué me sugerís? ¡Sugerencias, sugerencias!