Envía DRIVER al 5057 y descárgate tu controlador favorito
Parece mentira, pero lo de los SMS en España está convirtiendose en una práctica vergonzosa con la que especulan muchos servicios que deberían ser gratuitos, o al menos, tener un coste muy inferior al que tienen. Enviar un SMS para acceder a cierto tipo de descargas es una técnica muy utilizada en sitios piratas y de contenidos porno (que no, que no lo sé por experiencia), pero es que la cosa está pasando de castaño a oscuro, y ahora las descargas de software también están apuntándose a esta moda.
Un ejemplo perfecto de este fenómeno es Softonic: la web de descargas más popular de nuestro país utiliza todo tipo de tácticas cucas (¡ese Netam!) para lograr un posicionamiento absolutamente increíble en Google. De hecho, cuando pones el nombre de un programa en Google en español, ¡¡probablemente te aparezca antes el enlace en Softonic que el enlace a la página oficial del software!! Un ejemplo de que en Softonic se han currado mucho las técnicas SEO (aunque supongo que habrá truquitos sucios para lograr ese posicionamiento) y que las utilizan de forma muy rentable, porque luego pasa lo que pasa. Te vas a descargar el programa, y ¿qué aparece?
Pues que no sólo tienes que enviar un SMS, sino dos, para poder descargar ese software desde los servidores de Softonic. En las condiciones además avisan de que ese pago sólo implica poder descargar la aplicación, y no tiene nada que ver con el posible precio de la aplicación completa que puedes estar descargando como una versión de evaluación. Pero eso, claro está, es la letra pequeña. Menos mal que justo debajo aparece un enlace a la web oficial (que en este ejemplo funciona) y que permite descargarlo gratuitamente, aunque está claro que en Softonic destacan claramente la descarga de pago para que pases por caja.
Ese modelo de negocio de Softonic es discutible, pero en cierto modo están prestando un servicio por el que creen que deben comprar. Si no te gusta, búscate la vida en otro lado. Perfecto, salvo por el hecho de que en muchos casos se aprovechan del trabajo de los desarrolladores originales con el pretexto de "poder usar sus servidores". Pero al menos lo hacen bien, así que ole con hache.
Más grave es lo de otro tipo de servicios que igualmente ofrecen descargas, por ejemplo, de controladores: el otro día me vi en un problemón al buscar un driver de una tarjeta WiFi PCMCIA Conceptronic C54C. No lo tenía a mano ni estaba en casa, y cuando me llevé la tarjeta para instalarla en otra máquina me encontré con que me faltaban los controladores. Lamentablemente, la web oficial de Conceptronic ese día no pirulaba (vaya suerte), con lo que imaginé que una simple búsqueda en Google me permitiría encontrar el controlador buscado de forma gratuita e indolora. Ja.
Ni hablar: todos los enlaces que encontraba me dirigían a servicios en los que efectivamente el driver estaba disponible para descargar... previo envío de SMS o, alucina, ¡¡pago vía PayPal o tarjeta de crédito!! Un driver totalmente gratuito que el fabricante ofrece en sus servidores sirve para que unos avispillas se lleven ¡nada menos que 6 euros por cada incauto que se vea en la necesidad absoluta de descargarlos en ese momento!
Afortunadamente después de estar buscando un buen rato encontré unos controladores alternativos que pude descargar sin coste y que me solucionaron el tema, pero me quedé realmente alucinado con la situación. Creedme: guardad vuestros controladores como oro en paño, porque si un día los necesitáis y no los tenéis, la broma os puede salir muy cara. Qué pasada.