El monopolio del iPhone SE
Las resacas de los eventos de Apple son buenas para mascar un poco todo lo anunciado y tratar de hacer reflexiones más en frío. Para ir al detalle y a lo que realmente importa de lo anunciado. Hubo cero sorpresas en cuanto a productos: se sabía lo que se iba a anunciar, así que quedaban pocos detalles por desvelar. Pero precisamente uno de esos detalles fue el que rompió la balanza.


Pasaré un poco de hablar del iPad Pro de 9,7 pulgadas -no acabo de entender por qué no le ponen un nombre específico-, que me parece básicamente un iPad Air 3 con soporte de puntero. Muy potente, pero demasiado compacto para que sea una apuesta sólida en productividad. De hecho me parece un medias tintas que no cumple el objetivo principal -ser un convertible de garantías-, así que aquí yo me iría o bien al modelo de 12,9 pulgadas, o bien optaría por un iPad Air 2 y le acoplaría un teclado Bluetooth. La única razón que puede apoyar esa compra es la del soporte del puntero, y tampoco creo que sea para tanto :) .
El detalle que rompió esa balanza no fue que el iPhone SE recuperara la tendencia perdida de los móviles de gama alta de 4 pulgadas. No. Ni que iguale al iPhone 6s en procesador, cámara, memoria o soporte de Apple Pay. Todo eso es relevante, por supuesto, pero lo que desequilibra todo es su precio.
489 euros. Parecen muchos euros, pero estamos hablando de un móvil que es 250 euros más barato que el iPhone 6s básico. Obtienes todo lo que tiene su hermano mayor salvo el soporte 3D Touch (ya ves tú), y cuentas con un cacharrito armado hasta los dientes que puedes manejar con una mano y que es perfecto para los amantes de lo compacto.
A mí me parece un teléfono absolutamente rompedor, uno que hará que no solo millones de usuarios con el iPhone 5s se lancen a su compra, sino que también convencerá a unos cuantos amantes de dispositivos Android que buscaban un iPhone de garantías por menos de 500 euros. Me parece que como decía Alejandro Nieto -compañero en Xataka Android-, este dispositivo es una amenaza para Android. Y no lo es necesariamente por tamaño, que también, sino de nuevo por ese precio que da una excusa a quienes se planteaban invertir 300 euros, quizás 350, y ven cómo ahora sí pueden tener un iPhone estirando un poco la inversión. Cierto que solo tenemos 16 GB -de verdad que esa decisión clama al cielo-, pero lo que me parece claro -y ya he dado 7 razones para ello- es que el iPhone SE lo va a petar.
Y si no, al tiempo.
Si os ha gustado el artículo, quizás queráis aportar. Significa mucho más de lo que imagináis. ¡Gracias!
