El iPhone 16 es más Pro que nunca

Sorprendido me hallo ante la presentación de ayer de Apple. Acostumbrado a que la firma se invente barreras artificiales para diferenciar un producto normal de uno Pro, ayer vi por primera vez en varios años cómo esa línea desaparecía.
Los iPhone 16/Plus son, diría, los iPhone "asequibles" de Apple más interesantes de los últimos años. Hay algunas desventajas, claro. pantallas más pequeñas y a 60 Hz, nada de telefoto dedicado, una CPU algo menos potente y un puerto USB-C con protocolo USB 2.0. Algunas opciones avanzadas de cámara o de vídeo también se quedan fuera, pero es que esas opciones —como la de cambiar el tipo de mezclador de audio durante los vídeos— son ciertamente "Pro" y no son especialmente útiles para el común de los mortales.
Así que sorpresa: el iPhone 16 es más Pro que nunca.
Y lo es porque entre otras cosas Apple ha incluido en ellos el botón de acción de los iPhone 15 Pro/Max del año pasado, pero además ha incluido la que para mí es la gran novedad de estos dispositivos.
El botón de captura, que Apple llama Camera Control.
Ese botón es en realidad una especie de trackpad con una sensibilidad excepcional. Tanto es así que al parecer cuando lo usas parece realmente que estás presionando un botón con dos niveles de presión. Ayer ya dijeron que próximamente estará disponible el modo de disparo de las DSLR: media pulsación y enfocas, pulsación total y disparas. Fantástico.


La implementación que se vio en las demos, eso sí, parecía algo confusa, y me parece muy de Apple eso de presumir de que "con una sola pulsación ya se activa la cámara". Hace años que puedes hacer eso en cualquier móvil Android, por ejemplo configurando la doble pulsación del botón de encendido para activar la cámara. Yo lo tengo así en mi Pixel 8 Pro, pero es que ya antes, hace unos cuantos años, fue una opción que me maravilló de los antiguos Samsung Galaxy.
Lo de tener el zoom al alcance en ese Camera Control háptico no sé si al final será muy útil. Con tan poco recorrido de lado a lado me preocupa que al final lo más fácil sea acudir como siempre a la pantalla táctil. El gesto de pinza con los dedos es demasiado potente, y esta idea de Apple no tengo claro que cuaje, aunque ingeniosa es.
Lo curioso, como digo, es que Apple haya integrado ese botón también en los iPhone 16/Plus normales. Hubiera apostado dinero diciendo que solo iba a estar disponible en los modelos Pro, porque ciertamente parece la típica tontería que Apple utilizaría para atraer a más usuarios a sus modelos Pro. No sé: es como si de hecho quisiera vender más iPhone "normales".
Lo dije el año pasado: el iPhone 15 me gustó. Pues este iPhone 16 me gusta aún más, y aunque nadie le da demasiada importancia, la nueva disposición de las cámaras traseras es clave para poder grabar vídeos espaciales. Eso ahora mismo no parece ser relevante —solo los puedes disfrutar de verdad con las Vision Pro—, pero que Apple haya hecho ese cambio es un voto de confianza para unas gafas de realidad mixta que lamentablemente parecen estar medio muertas.
No seré yo quien me compre un iPhone —estoy feliz con mi Pixel 8 Pro—, pero debo reconocer que estos nuevos iPhone 16 tienen una pinta realmente estupenda. Apple se ha tirado el pisto, la verdad. Bien por ellos. Otra cosa es ya lo de Apple Intelligence, pero de eso ya he hablado un poquito por otro lado, así que no me repetiré.
Lo dicho. Bien por los iPhone 16. Muy Pros. Sin serlo.