El formato 16:9 no está tan mal

El formato panorámico me parece estupendo. No solo porque el mundo del cine y la televisión lo ha adoptado totalmente, sino que también ha demostrado su utilidad en todo tipo de portátiles. El problema es que no todos los formatos panorámicos molan igual.
En The Verge parecen tener un odio particular a las pantallas panorámicas, y desde hace años abogan por los equipos con pantallas en formato 3:2. 'Los portátiles panorámicos son absurdos', afirmaba hace un parde años uno de sus editores estrella, Vlad Savov, que escribía temas fantásticos y que acabó dejando la publicación para irse al lejano oriente. El tipo tenía ideas estupendas en muchas cosas y coincidía con su visión en muchos apartados, pero desde luego no en este, como ya comenté entonces.
Hace un par de días aparecía un tema que cogía el testigo de aquel. 'Adiós y hasta nunca al formato 16:9', titulaba la autora, Monica Chin. Se refería a la inexorable desaparición de ese formato de pantalla en portátiles, y de cómo ahora el mundo es de los portátiles en formato 3:2 y, por supuesto, de los 16:10 que por ejemplo se ha utilizado siempre en los MacBook.
Supongo que ellos querrían que todo el mundo hiciese portátiles 3:2. El motivo es evidente: trabajar con aplicaciones maximizadas es estupendo en esas pantallas. El problema es igual de evidente: no todo el mundo trabaja con aplicaciones maximizadas. Yo, por ejemplo, no lo hago, y mi escenario de trabajo es constantemente este (imagen editada a partir de la original de Freepik):


Así es básicamente como trabajo. Bueno, sin el Mac, el bonsai y ese puesto de trabajo minimalista. Pero os hacéis a la idea, ¿no? Siempre con dos ventanas de aplicación una al lado de la otra. En monitores de ordenador, por cierto, la norma se aparta totalmente de lo que hablan en ese artículo: el formato 16:9 domina de forma absoluta este firmamento, y que yo sepa no existen monitores 3:2 y los monitores 16:10 son más bien escasos (aunque en el caso de los de resolución 1.920 x 1.200, haberlos haylos).
Con portátiles, como digo, el problema está en que el formato 16:9 no es del todo óptimo porque no deja mucho espacio para la resolución vertical. Los 1.920 x 1.080 que nos encontramos en la inmensa mayoría de portátiles del mercado son el mal (según The Verge), y solo te puedes salvar de la quema si acudes a formatos de pantalla 16:10 que, como digo, se caracterizan por resoluciones como 1.920 x 1.200 o 2.560 x 1.600).
Yo la verdad, no veo tanto problema. Es cierto que ganar resolución vertical mola, pero es que mi condena aquí sería no al formato 16:9, sino a la resolución 1080p. Me gustaría que todos los portátiles del mundo llegaran como mínimo con resolución 1440p, más conocida popularmente (por alguna razón extraña) como 2K. Es la QHD de toda la vida, 2.560 x 1.440, y es la que considero óptima para trabajar prácticamente en cualquier diagonal. Luego tú ya puedes escalar y hacer todo más grande o más pequeño si quieres, pero al menos da algo de margen de maniobra. Con la resolución 1080p puedes aplicar escalado, pero el margen de maniobra es mucho menor.
De hecho mi condena personal no es al formato 16:9, sino que voy totalmente en contra del formato 3:2, que a mí no me parece óptimo en nigún caso. La razón es simple:
- Formato 3:2
- Trabajar con aplicaciones maximizadas -> bien
- Trabajar con ventanas enfrentadas -> mal
- Formato 16:9
- Trabajar con aplicaciones maximizadas -> bien*
- Trabajar con aplicaciones enfrentadas -> mal
*Cuidado, proque puede que te sobre un montón de espacio a los lados. Uuuuh, qué horror.
Puede que muchos de vosotros penséis de otra forma, pero la postura de The Verge aquí me parece bastante errónea: ¿por qué quitar opciones al gran público? No veo que la gente proteste en foros ni monte manifestaciones porque haya portátiles 16:9. Entiendo que los 16:10 son mejores en la panorámica, sí, pero de verdad, no es para tanto.
Ale, opinad. Os lo he puesto a huevo.