El Dell XPS 13 resurge con fuerza
Hace tres meses renegaba de mi Dell XPS 13. El portátil que me conquistó en el CES a principios de año y que analicé con mimo acabaría siendo mío a finales del mes de abril. La experiencia esos primeros meses fue contradictoria, errática, decepcionante.
El equipo se comportaba bastante bien al conectarlo a un monitor, teclado y ratón y hacerme olvidar mi sobremesa de toda la vida, como yo quería. Sin embargo su capacidad como portátil quedaba condicionada por esos pecados de los que hablaba, entre los que el touchpad era el más grave.


Lo comenté por aquí hace tiempo en algún post, pero el problema del touchpad, que yo asumía que era culpa de Microsoft o de Dell, no lo era tanto de ellos y sí más de un protagonista inesperado: Google. Los problemas sobre el soporte de los Precision Touchpad de Microsoft y el navegador Chrome están documentados desde hace tiempo, y allí quedaba claro que mi navegador preferido no se llevaba bien con el touchpad del Dell XPS 13.
En realidad el problema se extendía a otros equipos basados en Windows, algo que me confirmaba Tom Warren, de The Verge, cuando le preguntaba por sus impresiones vía The Unshut en Twitter. Este chico ha probado unos cuantos portátiles y sabe de lo que habla, así que eso me abrió un poco los ojos. No parecía que hubiera mucho que hacer salvo acudir al ajo y agua, pero entonces pasó algo.
No sé exactamente qué. Tras leer mucho sobre el tema probé uno de los trucos que la gente decía que podía funcionar: desactivar el "gesto de reducción de dos dedos para hacer zoom" en Configuración -> Dispositivos -> Mouse y panel táctil. Aquello probablemente ayudó, como también lo hizo el hecho de que también instalé la extensión SmoothScroll para Chrome (esta es mi configuración), pero lo que creo que ayudó en realidad fue alguna actualización de los controladores de Dell o quizás alguna de las actualizaciones de Windows 10.

En algún momento todo empezó a ir mucho mejor con el trackpad. El scroll es ahora más preciso, no hay apenas lag en la respuesta a ese desplazamiento vertical, y eso hace que usar Chrome en el XPS 13 sea por fin algo que no da problemas. Casi me recuerda al touchpad de mi MacBook Air, algo que parecía imposible hace unos meses.
Pero es que además también han mejorado el resto de problemas que tenía. Por ejemplo, el de la conexión al monitor externo: no he vuelto a tener conflictos al suspender el equipo o apagarlo: da igual lo que haga, cuando conecto el cable mini DisplayPort, el monitor detecta la señal y se pone en marcha. Incluso se han apaciguado esos humos que parecía tener mi Dell XPS 13 y que hacían que bufase más de la cuenta cuando no debía. Ya casi no bufa salvo en situaciones lógicas, y lo cierto es que estoy sorprendido y, lo que es más importante, encantado.
Puede que en esa mejora haya tenido mucho que ver la aparición de los nuevos Dell XPS 13 con procesadores Skylake. y de hecho recuerdo haber leído el análisis de Joanna Stern y ver esto:
I’ve been testing the powerhouse XPS 15 for the last week and the trackpad navigation is the best I have seen on a Windows laptop in my decade of reviewing. Yes, it even comes close to rivaling Apple’s longtime champion trackpad responsiveness.
Puede que las mejoras del touchpad de esos nuevos modelos se tradujesen también a los "antiguos" (nueve meses son un mundo), y que la actualización en el software y los controladores se aplicasen de forma amplia por parte de Dell a todos los XPS sin importar la familia de procesadores que los gobernase. Lo cierto es que hoy por hoy mi Dell XPS 13 ha ganado bastantes enteros.
Ha resurgido. Ole con ole.
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