Cuando el MacBook Air era el mejor portátil del mundo

A ver, que estamos hablando de Apple. La que te da tres de
calarena y una de
arenacal. La misma que desde hace años hace una cosa bien y tres mal. Con el evento de hoy esperaba, como casi siempre, un milagro. Pobre de mí. En cierta forma sí que nos han dado ese milagro. Lo que pasa es que era más bien un milagrillo con truco. Un milagrillo caro, para entendernos.
Quizás convenga recordar de dónde venimos. Apple era una empresa que podía presumir de tener los mejores productos del mundo. Y podía hacerlo porque los tenía de verdad, no porque ellos dijeran que los tenían. OS X era un sistema operativo sin parangón, el iPod fue un reproductor sin parangón, el iPhone fue un smartphone sin parangón (como su cámara durante muchos años) y el MacBook Air fue un portátil sin parangón.
Eran años en los que el fondo era más importante que la forma. En los que el diseño estaba supeditado a la función, y no al contrario.
Y entonces empezaron a cargarla. El diseño era lo importante. Molar era lo importante. Para cuando nos dimos cuenta teníamos con nosotros Mac Pros carísimos y obsoletos, MacBook Pro con esas utilísimas Touch Bar y teclados a prueba de bomba, un macOS dejado de la mano de Dios o iPhones preciosistas y que por primera vez perdían la batalla de la fotografía móvil.
En ese tortuoso camino hubo también algunos aciertos, pero en general la percepción (mi percepción) era la de que Apple ya no hacía los mejores productos del mundo. Seguía diciéndolo, pero no los hacía.


Así llegamos al evento de hoy, y en él hasta yo me sentí algo ilusionado cuando Tim Cook anunció la llegada del MacBook Air con pantalla Retina. Es algo por lo que había suspirado hace tiempo (no una, ni dos, sino tres veces), así que era normal que estuviese parcialmente emocionado. Y a medida que iban desgranando las especificaciones, más y más decepciones. Desconfío del teclado e incluso de la pantalla, que como comentaban en Reddit es de tan solo 300 nits (frente a los 500 del MacBook Pro 13), pero también desconfío de esos puertos USB-C que de nuevo imponen esa dictadura de Apple en la que el los dongles son inevitables. No entiendo qué tenía de malo incluir una ranura SD por ejemplo, pero lo peor de todo es la configuración hardware.
Apple no ha indicado el procesador específico de este MacBook Air, pero sabemos que es un Core i5 dual-core a 1,6 GHz de frecuencia base, con 4 MB de caché L3 y que puede llegar a 3,6 GHz en modo Turbo Boost. No he encontrado ningún micro que coincida con esas especificaciones, pero diría que es una versión especial del Core i5-8200Y, un procesador anunciado en agosto de este año y que tiene un TDP de 5 W. Puede que no sea este, ojo, porque en Apple hablan de unos gráficos integrados Intel UHD 617, y solo he visto un hipotético Core i7-8510Y con esa iGPU. A saber.
Sea como fuere me parece una elección cuestionable, sobre todo cuando el último MacBook Air no Retina ya era una estafa en este sentido: en 2017 Apple lo "renovó" (por decir algo) con un Core i5-5350U, un modelo lanzado en el primer trimestre de 2015, más de dos años antes. No solo eso: es un modelo de 15 W de TDP, así que ¿qué ha cambiado en el chasis y la refrigeración para limitar el micro a esa versión que consume tan poco? Entiendo que quieren un procesador que permita un diseño fanless, pero dudo que dar el salto a un Core i5-8265U —con un coste similar— hubiera sido tan problemático.
No solo eso: estamos ante un equipo que cuesta 1.199 dólares en Estados Unidos y (bendita paridad, impuestos y demás) 1.349 euros en España. Y eso para la versión con 8 GB de RAM y 128 GB de SSD, porque el modelo con 256 GB sale por 1.599 euros. Alegría.
No sé cómo lo veis vosotros, pero creo que hay opciones mucho mejores en el mercado. El Huawei Matebook X Pro con un Core i7-8550U, 8 GB de RAM, 512 GB de SSD y una GeForce MX150 sale por 1.699 euros en Amazon, por ejemplo. O este HP Spectre x360 (Core i5-8250U, 8 GB de RAM, 128 GB de SSD) por 1.099 euros en Amazon. O un Lenovo Yoga 920 (Core i7-8550U, 8 GB de RAM, 512 GB de SSD) por 1.199 euros en Amazon. Algunos hasta podrían mirar opciones de Dell, ya en plan locura total, por aquello de vivir peligrosamente. Yo que sé.
Lo que tengo claro es que el MacBook Air Retina no es el mejor portátil del mundo. Ni con ese precio, ni 200 euros más barato. Es un fraude tecnológico más. Uno de los que confirman mi Teoría del Fraude Tecnológico™, y que Apple consolida una y otra vez con unos productos que por fin aciertan en algunas cosas (Touch ID en el portátil mola) pero que son un engaño total en otras muchas. No es solo que sea caro: es que además a ese precio uno esperaría algo bastante más potable a nivel de hardware. En ese rango de precios hasta consideraría hasta el MacBook Pro de 13 pulgadas sin Touch Bar, que por 1.500 euros no es precisamente barato pero que oye, al menos es un poco más honesto con su propuesta.
Con las ganas que tenía de que me convencieras con el MacBook Retina. Hasta pensaba que igual sería un candidato para volver al redil. Qué decepción, Apple.
Otra vez.