BulletProofX en Gutsy: ¿Tecnología a prueba de balas? ¡Mentira!

Cuando se hablaba de las novedades que integraría [tag]Gutsy[/tag] muchos comentaban las bondades de [tag]BulletProofX[/tag], una idea que permitiría reconfigurar el servidor gráfico desde un asistente con GUI que simplicaría mucho un proceso que habitualmente se hacía a mano, mediante la edición del fichero /etc/X11/xorg.cong o el uso del comando "dpkg-reconfigure xserver-xorg" que fue todo un descubrimiento para mi. Teóricamente la idea es genial, y tenía ganas de probarla, pero cuando al fin he tenido la oportunidad resulta que no me tira ni para atrás.

El otro día instalé Gutsy en mi viejo portátil Omnibook 500 de HP que dispone de una ATI Rage Mobility 2x. Mi intención era ver si podía usar Compiz Fusion en ella, pero para eso primero tenía que conseguir lograr que el servidor X soportase efectos 3D, algo que es imposible por defecto. Encontré un viejo tutorial en UbuntuForums que explicaba cómo lograr al menos algo similar mediante la compilación de DRI y del driver Mach64, pero me he cargado el servidor de ventanas, que ahora no arranca ni para atrás.

No pasa nada, pensé: "siempre tendré mis soluciones del abuelo Cañete para solucionarlo a la vieja usanza". Cuando reinicié en modo 'recovery' de repente me di cuenta de que algo raro pasaba: ¡se me activaba BulletProofX! En realidad podéis ver esa ventana inicial:

ya que la utilidad la podéis lanzar en cualquier momento con la orden

sudo python /usr/bin/xfailsafedialog

Pero no conseguiréis configurar nada a no ser que realmente estéis en modo de recuperación del sistema. En cualquier caso, a mí sí que me salía lo de "Configure", pero tras probar varias configuraciones de todos los tipos y colores no logré absolutamente nada. Los xorg.conf generados son muy bonitos, pero no logran resolver el problema  - sospecho que parte de culpa la tiene el teclado - así que ahora estoy desinstalando el servidor y gnome y volviéndolos a meter desde cero, aunque más me valdría volver a instalar de cero.

Lo cierto es que la utilidad tiene buena pinta, pero funcionar, no funciona. Menuda caca de tecnología a prueba de balas. Menos mal que acababa de instalarla y no había hecho gran cosa. Y lástima de Compiz Fusion en el portátil, aunque duda que hubiera corrido con la suavidad necesaria :(

Por cierto, ya está todo funcionando como antes de meter la pata. Ale, a dejarme de mamonadas con el portátil, que siempre me olvido del famoso "si funciona ,no lo toques". :P