Apple y los parásitos digitales

El calificativo no es mío, ojo. Es de Antonio Ortiz, que publicaba hace unas horas un tuit en el que destacaba cómo la empresa de Cupertino está "imponiendo una tasa a todo [lo] que se genere usando un iPhone".
Tiene razón, y ni es el primero ni será el último en hacer algo así. Lo que pasa es que lo de Apple está siendo como muy todo de golpe. La empresa dirigida por Tim Cook estaba razonablemente tranquila hasta hace aproximadamente un año. El lanzamiento de los Apple M1 era brutal, sus iPad, sus MacBook Air y sus Mac mini eran equipos razonablemente asequibles y el lanzamiento de Apple TV+ estaba bien porque aunque tenían poco catálogo, al menos solían tener cosas de calidad. No solo eso: no molestaban (apenas) con publicidad en sus aplicaciones y servicios porque ese no era su modelo de negocio.
Pero en los últimos meses el cuento ha cambiado a lo bestia. A ver, así a bote pronto:
- Salen los chips M2, y los primeros MacBook Air M2 son de repente mucho más caros
- Salen los nuevos iPhone 14, y son más caros que nunca.
- Y no solo son los iPhone 14: las apps de la App Store son entre un 20 y un 25% más caras. Y por si fuera poco, hoy han aparecido sus advertencias sobre eso de que apps y juegos en su tienda hagan uso de NFTs y criptos. Quiere su parte.
- Sacan un reloj de gama alta. Es muy caro, y tampoco parece que sea para tirar cohetes.
- Salen los nuevos iPad básicos con diseño de iPad Air. Son mucho más caros. Los nuevos iPad Pro con el M2, también claro, aunque no cambien en apenas nada más.
- Suben los precios de Apple Music, Apple One y Apple TV+. Este último pasa de costar 4,99/mes a 6,99 mes.
- Comienzan a meter más publicidad, ahora en la App Store (pocas semanas después de decir que "la publicidad digital no es mala"). El pastel es demasiado jugoso y Apple se está convirtiendo en un gigante publicitario mientras presume de proteger nuestra privacidad.
Solo he repasado titulares de los últimos meses, pero seguro que pilláis el tema: Apple es más cara que nunca y tiene más publi que nunca.
La pregunta es, ¿Qué gana Apple con eso? Pues está claro: más ingresos o al menos más beneficios.
Ahora bien. ¿Qué ganamos los usuarios?
Absolutamente nada.
Si los productos son mejores, no lo son de forma proporcional a la subida de precio —el iPad es un buen ejemplo, mejora en algunas cosas pero sigue habiendo fallos excepcionales—. La mayoría de productos siguen la vieja norma de las mejoras iterativas —que se lo digan a los iPhone 14, mal refrito de los iPhone 13—, y la cosa es vergonzosa para la App Store o para Apple TV+.
No es que Apple esté sacando pelis y series a lo bestia como sí intentan hacer Netflix, HBO o Amazon. De hecho son tan tacaños ahí como en el resto de las cosas, así que ¿por qué suben el precio? No es por la inflación amigos. Es por una sencilla pero potente razón.
Lo hacen porque pueden.
Ya está. No hay más. Como apuntaba Antonio, el poder de Apple y su influencia es tal que ahora mismo pueden hacer lo que quieran y la gente (probablemente) no se inmutará y seguirá pagando. Ya han conseguido hacerse (más o menos) imprescindibles para mucha gente, así que toca aprovecharse de ello. Si hay que exprimir a la plebe, se la exprime, que para eso está.
Es como lo que estamos viviendo con los precios de todo lo demás, que están subiendo un quintal sin que podamos hacer nada. Sube la gasolina, la pagamos. La luz, la pagamos. El gas, la comida, las cervezas... lo pagamos. Hasta que no podamos más, claro. Esto no tiene marcha atrás, así que no sé cómo acabaremos, pero la cosa desde luego no pinta bien y no parece que sea fácil que cambie. Y lo dicho: Apple no ayuda y se sube al carro de los que nos exprimen.
Insisto: no es la primera ni será la última en hacerlo. Es una empresa, y está para ganar dinero, eso lo entiendo. Hacerlo así, no obstante, me parece como poco discutible. Y aquí estoy yo para discutir, por supuesto. Y para poner un poco firme a este y a cualquier otro parásito digital que se plante en escena.
Así no, Apple. Así no.
Actualización (26/10/2022): Antonio Ortiz acaba de publicar hace un ratito su visión sobre el tema y me ha robado el titular que yo le había robado a él ("quien roba a un ladrón merece cien años de perdón", ¿no?)